jueves, 27 de octubre de 2011

MISIVA

Kitolandia, 27 de octubre del 2011

A kien korresponda:

Rogaría atienda pronto la presente, me dirijo a usted para pedirle se digne adoptarme y akompañarme en las noches frías e incendiarlas un poko entre su piel. Prometo no molestar salvo kontadas excepciones donde me entrometeré tanto en su vida ke se mezclará kon la mía.
Komo poko (esa es una pekeña mentira ke espero kede entre los dos), duermo de pie (prefiero dormir a su lado, aun ke prefiero mas no dormir) y ronroneo kuando estoy feliz. Entre otras kosas soy buen amo de kasa: kocino, lavo, limpio y desinfecto. Eso si no prometo dejar de amarla, de besarla, de quererla y sorprenderla kon mis estados de lokura el resto de mi vida.
Seguro de kontar kon su pronta adopción me despido.
El hombre ke escribía kartas.

Pd: En un instante de lucidez las letras suenan a petición, por ke los son, los sentimientos inundan mi piel por tenerte en mis venas, las noches desesperan por ke ya prové de ti y me kedo.
Excusas para decirte de mil maneras ke formas parte de mi lokura, de mi vida, ke kiero tenerte en este para siempre ke komprendí kontigo.

sábado, 1 de octubre de 2011

NUEVA ARMA

Aun sin pensar en las armas ke debía llevar a la batalla vislumbro regocijado el kallejón sin salida, su última morada, la luna uña lo akompañaba kon nubes ke la besaban, al abrir la puerta enkontró suspiros venenosos, destellos de soles okupados, y un pekeño fuego negro ke brotaba de una especie de korazón, lo miro inkieto esa arma es nueva pensó, al tokarla sus dedos se kemaron y empezaron a ennegrecer, sus uñas se volvieron garras y la kemazón subía rápidamente por sus dedos kon un intenso dolor, la angustia se apodero de él, keria korre eskapar de este tormento ke inundaba su cuerpo pero permaneció inmóvil por ke algo dentro se lo impedía, minutos largos, agonía extensa todo su ser kemado y transformado, se levanto del suelo abrió los ojos y se sintió diferente, el korazón de fuego negro empezó una extraña mutación poko a poko empezó a crecer a su alrededor piel y huesos, nació ante sus ojos una mujer kon kabello ondulante, kon ojos de fuego negro, él la miro atónito, ella kamino sin vacilaciones lo miro lo beso lo akarició, el empezó a desgarrarla, a mastikarla a komercela…
Kuando termino el bankete su ser estaba kompleto, nunca mas necesitaría de armas para su guerra salió del baúl y cerró la puerta ke estaba seguro de no volver a abrir.
Miro por última vez la luna a la ke teñiría de rojo esa noche.