miércoles, 20 de enero de 2010

EL NIÑO KE APRENDIA (I)

Una mañana llena de sol, la gastritis martillaba el estómago de un niño, el se sentía muy adolorido y triste, entonces empezó a hablar kon la kostra de su rodilla, ella le konsolaba por el dolor ke tenia y le decía ke haga kositas komo: tomarse diablillos, komerse tachuelas, etc, etc, para ke le pase el dolor de su pancita.
En medio del dolor el niño vio una sombra a su lado, era la sombra de su dolor, ella estaba muy triste por ke nadie la keria y por kada tristeza se ponía mas oskura, el niño la abrazo y la guardo en su korazón, desde entonces aprendió a vivir y ser feliz con su gastritis y su dolor.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Compadre que fea es la gastritis.. Lástima que no pueda ver mi dolor, de otro modo el me haría compañía...

Salomé Andrade dijo...

jajajjajajaja!!! loko.. me recordo a mi en mi época de crisis gástrica y cuando grito al universo un par de diablillos!!! y como buen san pedro niego la belleza de mis estados múltiples de embriaguez... oh por cierto.. hoy es viernes para siempre marilyn marilon! deseas hablar conmigo por telefono y empezar a hacer el amor? y no la guerra claro!... hay amor!!! te kiero amigo mio!

gatodeplata dijo...

ni mierda.. el dolor es tan rico.. o ke hablen mis brazos mis huesos mi ser, la gente ke no sirve y a la larga esta, el mundo detras de las paredes, las ratas mas sabias ke el hombre, segun lovecraft, todo lo ke nadie ve, vive en el corazon de los locos y enamorados, de los casados de la vida